Este humilde blog nace a partir de dos de mis pasiones, el fútbol - que por poco me lleva a ser jugador profesional y que a estas alturas de mi vida ya hubiera terminado por aburrirme y sobre todo cansarme, siempre fui flojo para el trabajo físico - y la música salsa, aquella que con solo escuchar sus primeras notas es capaz de alegrarle el día a cualquiera.
Y ambas tienen un punto de encuentro y coincidencia en mis gustos al recordar aquellos domingos de verano en 1984 cuando se realizaban aquellos festivales deportivos organizados por el Club Social Cultural y Deportivo CONFRATERNIDAD; recuerdo que se cerraba la "Calle 10", se armaba la cancha a lo largo (a pesar de tener los lados empedrados) y cuando jugábamos los más pequeños, categoría zanahoria, volteaban los arcos para que sean más chicos, claro acordes con nuestra pequeñez.
En la esquina con el Jr. Elías Chunga ponían un kiosco para la venta de bebidas, hasta donde nos llevaban los señores del barrio (Castillo, Benites, Fernández) para comprarnos nuestras Piña Canada Dry luego de sendas goleadas al Van Hallen, a La Amistad y cuanto remedo de equipo se nos parara al frente; eramos un equipo demoledor, recuerdo; con el Chino Coco en el arco, con Ángel Tejada y Miguel Castillo abajo y más adelantados Pepos (hermano de Miguel) Michael Perea y quien redacta.
Obvio, todo ese ambiente festivo estaba amenizado por un potente equipo estereofónico, aunque esas son las características de los equipos de audio hoy en día, hace 25 años desconozco cual habría sido las condiciones del equipo pero recuerdo se escuchaba bastante fuerte y a veces hasta más que el silbato del ocasional arbitro (que muchas veces era otro vecino o algún voluntario).
Y mientras se disputaban la seguidilla de reñidos partidos, los parlantes emanaban letras de lo que hoy le llamamos salsa dura: "...mírale bien las manos en ella no tiene un callito, ese nunca ha trabajado y siempre anda bien bonito" nos cantaba Lavoe y después Ruben Blades nos contaba la historia de Noe "...Por la tanta perversión que en el mundo Dios observó, vino y le dijo a Noé, Hey! prepara tu embarcación coge de todas las aves y animales del mundo, que no quiero que se ahoguen al llegar la inundación".
Quien lo creyera..., cuanto tiempo ha pasado. La Calle 10 sigue empedrada, las radios locales siguen poniendo esa música, la Piña Canada Dry salío de circulación; pero no el afecto a las personas líneas arriba recordadas y otras tantas amistades que, sin duda serán tema de posteo, pero en otra oportunidad...
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